Se me viene encima el peso de la luna
con sus resplandores robados
y me trasporta a noches flamantes
de idilios lunáticos...
La luna pintaba nuestra noche
La luna alumbraba nuestro balcón
La luna alumbraba nuestro balcón
La luna penetraba nuestras persianas.
Hostil pedazo de piedra flotante
reflectante
ladrona.
Horrible mentirosa de ilusiones eternas
voyerista
lámpara para las polillas.
Me desengañas una noche
después de cantarte placeres
y derramar lágrimas en tu nombre.
Me desengañas belleza falaz...
No tienes ningún poder.
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